Minimalismo, elegancia, artesanía y hasta desamor: Así fue la Milán Fashion Week SS 25
Milán, una ciudad que ha sido y es un referente indiscutible en el mundo de la moda, reafirmó en la pasarela su estatus como uno de los eventos más importantes del calendario. Desde Gucci hasta las apuestas más disruptivas como AVAVAV, la Milán Fashion Week SS 25 ha vuelto a consolidarse como el núcleo donde la creatividad y la innovación convergen para redefinir la industria.
Todas las imágenes vía Vogue Runway
Nueva York, Londres, Milán y París, son los cuatro destinos que cada septiembre (y febrero) marcan los caminos a seguir en la vestimenta de los apasionados de la moda. Las Fashion Week han terminado en la pasarela, pero continúan cada día en nuestro armario y en la calle. A continuación, todo lo que no te puedes perder de la Milán Fashion Week SS 25.
Gucci
El desfile de Gucci era uno de los más esperados de la semana de la moda italiana marcando la vuelta de Sabato de Sarno tras su debut como director creativo. Y es que la colección SS 25 fue una oda al legado de la casa italiana, pero, por supuesto, con un giro contemporáneo y minimalista que sorprendió a la industria.
De Sarno llevó la sastrería clásica a nuevas alturas con trajes de cortes rectos y tonalidades suaves. Destacaron los detalles minimalistas y la simplicidad en los diseños, con un toque relajado, pero sin perder la elegancia y el ADN tan propio de Gucci. Los pantalones de talle alto y las blusas transparentes en tonos pasteles dieron un aire fresco y contemporáneo, reafirmando la evolución de la marca bajo su dirección.
Gucci SS 25 vía Vogue Runway
Prada
Con su minimalismo subversivo, Prada ha vuelto a cautivar con su enfoque deconstructivista. Miuccia Prada y Raf Simons presentaron una colección que navegó entre el minimalismo extremo y los detalles industriales, con chaquetas asimétricas y faldas largas sobre pantalones. Los colores neutros dominaron la propuesta en un claro gesto hacia la funcionalidad, mientras que las formas arquitectónicas subrayaron la dualidad entre lo práctico y lo poético. Como siempre, Prada sigue rompiendo paradigmas demostrando que el minimalismo puede ser tanto disruptivo como lujoso.
Prada SS 25 vía Vogue Runway
Max Mara
Dos palabras: serenidad y lujo. Max Mara destacó una vez más por su capacidad de crear prendas que rezuman lujo y serenidad al mismo tiempo a través de su minimalismo refinado. La colección SS 25 fue una tributo al estilo utilitario, con una clara inclinación hacia lo práctico pero sin dejar de lado la sofisticación. Destacaron los trajes monocromáticos en tonos tierra y pasteles, combinados con abrigos ligeros que reflejan un enfoque sobrio pero poderoso. Max Mara continúa siendo sinónimo de elegancia discreta, consolidando su estatus en la moda italiana.
Max Mara SS 25 vía Vogue Runway
Bottega Veneta
Matthieu Blazy presentó una colección para la firma que fue aclamada por su enfoque en la artesanía. Las piezas, que parecían sencillas a primera vista, escondían una complejidad técnica que las hacía únicas. Las prendas de cuero trenzado, por ejemplo, exhibieron la habilidad manual que caracteriza a Bottega, mientras que los looks monocromáticos y los detalles minimalistas añadieron una frescura contemporánea. Blazy demostró cómo la artesanía italiana puede fusionarse con la innovación para ofrecer una propuesta moderna y sofisticada.
Bottega Veneta SS 25 vía Vogue Runway
Dolce & Gabanna
Abundancia y nostalgia. La firma italiana subió a la pasarela su habitual opulencia, esta vez con una clara referencia a sus colecciones icónicas de los años 90. El encaje, los corsés y los detalles barrocos dominaron la colección, mientras los colores vibrantes, como el rojo, el negro y el dorado, hicieron un guiño a la herencia siciliana de la marca. Los diseñadores destacaron por una interpretación moderna de la feminidad, enfatizando la sensualidad y el dramatismo que siempre han caracterizado su trabajo.
Dolce & Gabanna SS 25 vía Vogue Runway
Valentino
Belleza y empoderamiento son los apellidos de Valentino. Pierpaolo Piccioli continuó su exploración de la feminidad con una colección que mezclaba lo romántico con lo rebelde. Las siluetas fluidas, los colores pastel y los detalles florales dominaron la pasarela, mientras que las piezas más estructuradas, como las chaquetas con hombros exagerados, aportaron una sensación de poder. Piccioli sigue siendo un maestro en crear prendas que dan fuerza a la mujer moderna, manteniendo un equilibrio entre la delicadeza y la fuerza.
Valentino SS 25 vía Vogue Runway
Fendi
Ambigüedad y contraste nunca faltan en el mundo de la moda y, en el caso de Fendi, Kim Jones lo ha demostrado a través de tradición y modernidad. Su colección fue un homenaje al legado de la casa y a los 100 años de Fendi, mezclando la elegancia clásica con toques contemporáneos. Destacaron las prendas de sastrería impecable, en su mayoría en tonos neutros y materiales lujosos, como la seda y el ante. La colaboración con Red Wing para las botas de cuero fue una declaración de intenciones, uniendo tradición artesanal con modernidad.
Fendi SS 25 vía Vogue Runway
Diesel
Glenn Martens, director creativo de Diesel, presentó una propuesta que se enfocaba en el denim, un material que siempre ha sido central en la firma. No obstante, para la colección SS 25, Martens decidió llevarlo al extremo, algo muy propio de Diesel. Hemos visto jeans que presentaban lavados agresivos, cortes inusuales y detalles futuristas. A través de su concepto “D is for Denim”, la firma reimaginó cómo el tejido más popular del mundo puede seguir reinventándose, conservando su esencia rebelde, pero con una estética vanguardista.
Diesel SS 25 vía Vogue Runway
The Attico
¿A quién no le han roto alguna vez el corazón? El dúo detrás de The Attico, Gilda Ambrosio y Giorgia Tordini, sorprendió al convertir la pasarela en un espacio emocional inspirado en la melancolía y el desamor. Su colección en la Milán Fashion Week SS 25 mostró prendas que mezclaban elementos andróginos y románticos, con formas holgadas y cortes fluidos en tonos apagados. Los vestidos asimétricos y las chaquetas de gran tamaño fueron un reflejo de la libertad creativa del colectivo, aprovechando, a su vez, para explorar la vulnerabilidad emocional con un giro sartorial.
Además, colaboran por segunda vez con Nike, explorando así la unión tan actual que existe entre el deporte y la moda que nos anima a disfrutar de ser nosotras mismas sin importar qué tipo de prenda llevemos encima. Tordini explicó que: «Esta temporada mezclamos ropa deportiva para resaltar el lado masculino de nuestra mujer, una faceta que siempre está presente».
The Attico SS 25 vía Vogue Runway
AVAVAV
Uno de los shows más inusuales fue el de AVAVAV, una propuesta que usó el humor y la ironía para criticar la velocidad y la superficialidad de la industria de la moda en colaboración con Adidas.
En un desfile con caídas simuladas, carreras en la pasarela y prendas que parecían desintegrarse, la firma cuestionó el ritmo implacable de la producción de tendencias, enfatizando la necesidad de ralentizar y reconsiderar la sostenibilidad. Esta colección no solo fue un espectáculo visual, sino una declaración audaz sobre el estado de la moda actual.
AVAVAV SS 25 vía Vogue Runway
Marco Rambaldi
No todo fue sobre las grandes casas. Milán sigue siendo una plataforma clave para diseñadores emergentes. Entre ellos, Marco Rambaldi fue uno de los más comentados presentando una colección que exploraba la identidad, el género y las estructuras sociales a través de estampados audaces y siluetas inclusivas. Con una mezcla de nostalgia y frescura, Rambaldi destacó como una de las voces más relevantes de la moda italiana joven.
Marco Rambaldi SS 25 vía Vogue Runway
Cecilie Bahnsen
Otro nombre que capturó la atención fue el de Cecilie Bahnsen, que combinó delicadas texturas con formas etéreas creando prendas que parecían flotar. Su enfoque en la moda sostenible, utilizando técnicas artesanales, subrayó la creciente importancia de la responsabilidad ambiental dentro de la industria.
Cecilie Bahnsen SS 25 vía Vogue Runway
La Milan Fashion Week SS 25 ha sido un fiel reflejo de la dicotomía entre tradición y modernidad que caracteriza a la moda contemporánea. Propuestas audaces y mensajes profundos, reafirmaron que el futuro de la moda está en la conjunción de creatividad radical, sostenibilidad y un firme respeto por las raíces del oficio.
Sara del Río @saradrh