Amber Valletta en Helmut Lang, Nueva York, 1993. Photograph: Peter Lindbergh/ Peter Lindbergh, Paris/Galería Gagosian
El fotógrafo polaco nunca se centró en la moda cuando disparaba su cámara, para él el maquillaje e incluso la ropa funcionaban sólo como sonido de fondo. Su estilo se caracterizaba por el uso del blanco y negro como vehículo emocional, y por representar a la mujer de una manera profunda y sin artificios.
Izquierda a derecha: Estelle Lefebure, Karen Alexander, Rachel Williams, Linda Evangelista, Tatjana Patitz and Christy Turlington, Vogue USA, The White Shirts, California (1988) © Peter Lindbergh Estate
Con la llegada de Anna Wintour a las riendas de Vogue USA, llegó su primera portada. Wintour encontró unas fotos que Lindbergh hizo a varias modelos, entre ellas, Linda Evangelista y Christy Turlington en la playa con camisas blancas. Wintour, tras ver estas fotos, contrataría a Lindbergh para disparar su primera portada como responsable de la cabecera. Una edición que supondría cambio sísmico respecto a la estudiada formalidad que era la norma editorial.
Michaela Bercu en Christian Lacroix, 1988, elegido por Anna Wintour para su primera portada como editora de Vogue. Fotografía: Peter Lindbergh/ Peter Lindbergh, Paris/Gagosian Gallery
5 modelos, una portada para British Vogue, una foto en blanco y negro y la visión de Lindbergh. Esto fue lo que se necesitó para crear el concepto de las supermodelos. Una instantánea muy sencilla y minimalista de Naoimi Campbell, Linda Evangelista, Cindy Crawford, Tatjana y Christy en 1990, fue el certificado de nacimiento de este nuevo término en la cultura popular.
Las Supermodelos (de izquierda a derecha: Naomi Campbell, Linda Evangelista, Tatjana Patitz, Christy Turlington, Cindy Crawford) British Vogue, Nueva York (1990) © Peter Lindbergh Estate
George Michael vio la portada y las cogió para su video musical de ‘Freedom!’ en el mismo año. El cual inspirará a Gianni Versace en su show de otoño de 1991, estableciendo un nuevo estándar en los desfiles cuando aparecieron todas ellas en la pasarela. Para el cierre, Campbell, Crawford, Turlington y Evangelista aparecieron cantando la canción Freedom. Un momento que marcó un antes y después en el concepto y percepción de las modelos.
Desde entonces, Lindbergh ha dirigido sus 35 mm a todo el mundo, desde Kate Moss hasta Penélope Cruz. El resultado de años de trabajo son unas instantáneas extraordinarias, por su puesta en escena, con una gran inspiración en el cine, y por sus retratos realistas, con manchas y todo.
Kate Moss, Harper’s Bazaar, A Star is Born, Nueva York(1994) © Peter Lindbergh Estate/Harper’s Bazaar
Peter Lindbergh Dotaba a sus imágenes de un valor atemporal que ha resistido y resiste, como muy pocos trabajos lo hacen, el paso del tiempo. Prefiriendo el blanco y negro al color, capturó la belleza natural de cada uno de sus sujetos, casi como si estuvieran perdidos en un momento atrapado en el tiempo. Sin duda, un artista que ha dejado una huella imborrable tanto en la moda como en la fotografía.
Javi Lara @_javilara
Jasa Backlink Terbaik Jasa PBN © All rights reserved I Legal Notice · Privacy Policy · Cookies Policy
